Cotilleos, novedades y las últimas tendencias musicales

Quique Molares

Del 29 al 31 de octubre se celebró en Bilbao el BIME Pro, donde más de 1400 profesionales de las industrias creativas y musicales y empresas del sector se encontraron para crear lazos, lanzar nuevas propuestas e impulsar entre todos la industria musical.

Por supuesto nosotros no podíamos faltar y mandamos a nuestro rookie Quique y ‘todo terreno’ Lorena para cerrar acuerdos, y no lo neguemos, nos cuenten los últimos cotilleos de la industria musical ;). Y no te pierdas lo que Quique nos ha contado, porque hay noticias bien jugositas:

“A sólo unos días de haber llegado a esta empresa, ¡me envían al BIME’14! Lorena La Sirena y yo cogimos el avión para disfrutar de tres días de conferencias, reuniones, y conciertos en Euskadi.

Preparamos unas cuantas páginas de información sobre diferentes promotores musicales, jugamos a un “Quién es quién” de la industria, nos cargamos de cargadores portátiles bien chulos para repartir y allá que nos fuimos.

bime1

 
De la primera charla “Mercado Musical Español”, destacamos a un integrante del Ministerio de Cultura calificando la subida del I.V.A como “pequeño desastre”… ¡Por fin se reconoce! Básicamente, hacer una gira por España es mucho menos atractivo que en cualquier otro país, llegando a suponer casi un 40% lo que se llevan las autoridades entre una “cosa” y “otra”. Si se modifica, se podrá recuperar la competitividad exterior perdida.

Empiezan las primeras reuniones y conseguimos rascar un preacuerdo de venta de entradas para… la vuelta de un famoso grupo, que primero tocaba rock, pero después ya no. (Y sí, tranquilo, vuelven al sonido del principio).

Después de tanto acuerdo nos escapamos a ver a ¡¡Bob Lebseftz!! Algo así como el Woodie Allen de la Industria Musical: neoyorquino neurótico con hipertrofia analítica y clarividencia. Según su visión del mundo, hoy en día lo bueno no es suficiente, queremos superestrellas, y eso sólo se consigue con mucho talento, todo lo demás es vender esperanzas. Si eres una superestrella ganaras más dinero que nunca, si no habrá miles como tú.

Después pasamos a Scott Cohen y su teoría del long tail musical, donde es precisamente esa abundancia y atomización de la industria lo que hace que haya más posibilidades de monetización que nunca (artistas que tienen 150 fans, pero a los que les venden packs ultra-exclusivos por 150$ cada uno).

Muy interesante fue también la charla sobre festivales internacionales. Se habló de que hoy en día se puede ser fan en cualquier lugar del mundo, incluso sin ir al festival (¡yo soy fan del Burning Man y aún no he ido!). Conocimos el concepto F.O.M.O, – Fear Of Missing Out, es decir, el miedo de perderse algo – que reina en las redes sociales y lo que podríamos llamar “hechos sociales colectivos”, acontecimientos (desede festivales a programas de tele) que se viven en grupo gracias a las redes sociales. También se revindicó que los festivales venden contenido, no entradas, y que al final lo importante es generar una experiencia tan contundente que permita generar una base de acérrimos seguidores.

La charla de Alemania nos la saltamos, ya que lo primero que reconocieron es que 1) allí se siguen vendiendo muchos discos (¡WOW!) 2) Son de música tirolesa (¿¡QUÉ!?).

Y como remate: conferencia de “think thanks” sobre el futuro de la Industria Musical. Básicamente el “long tail” o los 99%ers están tomando el poder, es decir los pocos, los raros, los diferentes. En la industria musical cada vez hay más nichos con menos gente, pero dispuestas a gastar más en eso y solo en eso.
En teoría, la distribución y el alcance de la comunicación es masivo, pero en la práctica no. Vivimos en la “attention economy”, donde hay tanto de todo y el mundo vive a un ritmo ultrarápido, que la visibilidad, si llega, lo hace a través de muchos filtros. Y la industria va siempre unos pasos por detrás, porque pensar en abstracto y hacia delante es difícil, porque nuestra capacidad de asimilar la tecnología va más lenta que la propia evolución tecnología (como decía Jim Dodge).

Así que nos volvimos de Bilbao, contentos de lo que hemos conseguido y seguros de que en el futuro, sea el que sea, allí estaremos. ”

¿Qué? ¿Cómo te quedas?